Trasplantado, escultura de Roxy Paine,
instalada en la Dehesa Montenmedio
de Vejer de la Frontera
Con
el tronco algo inclinado
como
si hubiera crecido duramente contra el viento,
entre
pinos piñoneros, brillo a brillo, sombra a sombra,
trasplantado
permanezco.
Nada
por mí sube o baja,
ni
roedores ni insectos,
pero
cuando alas o manos
tocan
en mi tronco hueco,
cuando
un pájaro se posa
raudo
en mis ramas de acero,
vibro,
vibro como savia
que
recorriera mi cuerpo
y
llegara a las raíces
y
a las hojas,
que no tengo.
Con
el tronco algo inclinado
como
si hubiera crecido duramente contra el viento,
entre
pinos piñoneros, permanezco día a día,
sin
los anillos del tiempo.
Versión aumentada en dos versos del poema incluido en El espanto seguro (Biblioteca Sibila-Fundación BBVA, Sevilla, 2010).